Bueno, otra semana que termina. Otra semana en la que mis sentimientos van variando, como el calentamiento global. En serio, ¿A quien se le ocurre 24º en Invierno?...
¿Y que hice para deshacerme de toda esta ansiedad que me consume? Redecoré mi cuarto, obvio. La forma más simple de hacer catarsis cuando no contas con una abultada billetera en el bolsillo que te permita despilfarrar tus angustias por los vestidores de tus marcas preferidas de ropa. Decoré una de mis paredes con postales que me fui robando de palermo (bah, las de Look and Take), algunas otras que traje de mis viajes; y quedo algo lindo ¿Artistico? Tal vez.
Esperé la llamada, el mensaje de texto, el mail de aquel hombre, que todavia no he presentado. Que no es ni X ni Y. Que tiene nombre propio, pero que no voy a develar ahora, porque no tengo su autorizacion. Ese a quien le escribi Te extraño en una conversacion de msn el otro dia. Pero me habia olvidado de que él, no cumple promesas. De que sus "Te quiero" son efímeros y caducan al momento de consumirse. Me olvidé de que se parece a mi periodo; viene por una semana y desaparece un mes...
Y si... al final tanto trabajo de olvidarme y bla bla bla... Termine hablando de él. ¡Que debil que soy! Totalmente predecible... No puedo conmigo misma eh! Fue. Mi debilidad mental es tremenda. ¿Seremos todas asi? Tendria que hacer una encuesta, para confirmar esas sospechas. Mientras tanto me quedo con la opinion de que yo Si soy asi. De que cuando alguien se me mete en la cabeza no puedo dejarlo ir. Me obstino, me empaco como una mula. Y asi termino no? Metida hasta el alma con un flaco que no me ofrece nada y, sin embargo, por el que estoy dispuesta a arriesgarlo todo...
A veces creo que soy un poco minusvalida mental... Pero tus besos son mas ricos de madrugada, y eso le gana a cualquier pensamiento racional que se me pueda ocurrir en este momento.